Podéis visualizar o descargar la guía clicando directamente en la imagen o DESDE AQUÍ.
Aquí teneís un resumen de lo que podréis encontrar en dicha guía:
• Evaluación del riesgo: para poder aplicar medidas preventivas, antes de nada es necesario evaluar el riesgo. Para dicha evaluación, habrá que recabar información, basarse en aquello que marcan las autoridades sanitarias y consultar a las y los trabajadores.
• Medidas de prevención: el tema no es mascarilla sí o mascarilla no; pueden adoptarse más de un tipo de medidas. Entre éstas se encuentran, además de las medidas individuales de protección, medidas organizativas y medidas de protección colectiva. Entre las medidas organizativas, podemos mencionar, por ejemplo, evitar las aglomeraciones de gente o impulsar el teletrabajo. Asimismo, pueden adoptarse medidas de protección colectiva, tales como limpieza y desinfección o una ventilación adecuada del local.
• Grupos vulnerables y personas trabajadoras especialmente sensibles: mayores de 60 años, mujeres embarazadas o aquellas que por su estado de salud, patología o cualquier otro factor sean especialmente sensibles. Los servicios de prevención deberán identificar a las mismas y elaborar un informe sobre las medidas de prevención, adaptativas y de protección necesarias. Contáis con un anexo en la misma guía, para poder desarrollar este trabajo adecuadamente y hacer la medición de una forma más sencilla.
• Trabajadoras y trabajadores con covid persistente. Como sabemos, esta enfermedad deja secuelas en muchas ocasiones. Estos casos deberán ser tenidos en cuenta y realizar una evaluación a estas personas cuando se reincorporen a su puesto de trabajo, para poder decidir si necesitarán de alguna adaptación, si es necesaria alguna medida de protección específica y para coadyuvar en la completa recuperación de la persona. ¡Atención! El tema no es decidir si la persona es apta o no para su puesto de trabajo, sino aportar las medidas preventivas más adecuadas, teniendo en cuenta el estado de salud que atraviesa en ese momento.
• Nuevos contagios. Los casos leves y asintomáticos, así como los contactos estrechos, no deberán hacer cuarentena, pero sí deberán aumentar las medidas de protección (utilización de mascarillas) durante los 10 días siguientes a la aparición de los síntomas. En el caso de trabajadoras y trabajadores de centros sanitarios o que interactúen con personas especialmente vulnerables, podrán ser reubicadas en otras zonas o en otras funciones o, también, cuando sea posible, podrán adoptar la modalidad de teletrabajo. En los casos en que todo esto no sea factible, no acudirán al trabajo durante los primeros 5 días, tras lo que se les irán practicando pruebas de antígenos.
• Si, tanto los casos confirmados, como las trabajadoras y trabajadores especialmente sensibles, no pueden acudir a su puesto de trabajo, habrá que tramitar una incapacidad temporal. Todo esto lo tenéis mucho más ampliamente explicado en la guía y, además, encontraréis un par de anexos, para hacerle llegar la información pertinente a las y los facultativos de atención primaria.
Además de esta documentación, también os dejamos aquí las recomendaciones publicadas por Osalan y por el Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra, así como otros documentos interesantes: