¿Qué es el IPREM?

2020/02/04
Última actualización: 2023/01/25

Decreto 3/2004, de 25 de junio, para la racionalización de la regulación del salario mínimo interprofesional y para el incremento de su cuantía
Ley 31/2022, de Presupuestos Generales, 90ª Disposición Adicional

 

El IPREM (indicador público de renta de efectos múltiples) es un índice que se utiliza en el Estado para calcular las ayudas y prestaciones sociales. En cuestiones como subsidios de desempleo, ayudas a la vivienda, becas etc. se utiliza el IPREM para establecer tanto las cuantías a percibir, como los límites de ingresos máximos para acceder a las mismas. 

Fue creado por el gobierno del PSOE en 2004. Hasta el momento, se utilizaba como referencia el salario mínimo interprofesional para todas las prestaciones. Su objetivo fue recortar en el gasto en protección social, objetivo cumplido con creces, ya que desde ese momento las prestaciones son cada vez más bajas y cada vez se les deniegan a más personas y familias.

Este indicador ha estado prácticamente congelado desde el año 2010 y, aunque en los  últimos años ha subido algo (un 5% en 2021, un 2,5% en 2022 y un 3,6 en 2023), dicha subida es completamente insuficiente, tal y como veremos más adelante.

Va por descontado que lo primero que hay que poner en duda es la misma existencia del IPREM, ya que, como acabamos de explicar, su finalidad no es más que bajar las cuantías de las prestaciones.

Éstas son las cuantías para el año 2023:

  • Diario: 20 euros
  • Mensual: 600 euros
  • Anual (12 pagas): 7.200 euros
  • Anual (14 pagas): 8.400 euros

Como veis, se utilizan dos valores anuales: en 12 pagas o en 14 pagas. Por defecto, se utilizará como referencia el IPREM de 14 pagas, para todas las ayudas y subsidios en las que haya sustituido al SMI, salvo que se hiciese una mención expresa a la ausencia de pagas extraordinarias.

 
¿Para qué se utiliza el índice IPREM?

A la hora de conceder o no una determinada prestación, se toman en cuenta los ingresos de la persona solicitante. Es frecuente leer que, para poder acceder a una determinada ayuda, nuestros ingresos no pueden exceder cierto límite. Bien, pues este límite máximo, suele establecerse en función del IPREM. Asimismo, la cuantía de multitud de ayudas –es decir, lo que vamos a percibir- se calcula según el IPREM.

  • Para establecer el límite de ingresos de la persona que solicita la prestación.

Cuando solicitamos alguna prestación, para decidir si tenemos derecho a la misma, siempre se marca cuáles deben ser nuestros ingresos máximos. Esto, en muchas ocasiones, se fija utilizando el IPREM.

EJEMPLO: si tenemos que solicitar asistencia jurídica gratuita, los ingresos brutos familiares no pueden ser mayores a los siguientes (Artículo 3 de la Ley de Asistencia Jurídica):

– Para una persona sola: IPREM x 2 = 14.400 euros anuales
– Para una familia de 2 ó 3 personas: IPREM x 2,5 = 18.000 euros anuales
– Para una familia de 4 o más personas: IPREM x 3 = 21.600 euros anuales

Y sucede lo mismo conla mayoría de ayudas: ayudas a la vivienda, ayudas para comprar prótesis auditivas u ortodoncias, becas… Es el IPREM el que fija los límites máximos de ingresos de la unidad familiar.

Por tanto, cuanto menor sea el índice, más bajos serán los límites de ingresos, es decir, más pobres tendremos que ser para acceder a la ayuda.

  • Para calcular la cuantía de la prestación.

Para calcular cuál va a ser la cuantía de la prestación o, dicho de otra manera, cuánto dinero vamos a percibir, también se utiliza el índice IPREM.

Además, hay que tener en cuenta que en el caso de muchas prestaciones ni siquiera se percibe el 100% del IPREM. Así, en lo que atañe a los subsidios por desempleo, por ejemplo, no se cobra más que el 80% del IPREM: tan solo 480 euros mensuales (menos de la mitad del salario mínimo interprofesional).

Por tanto, cuanto menor sea el índice, más precarias serán las ayudas.

 
Éstas son algunas de las prestaciones dependientes del IPREM:

– Los límites mínimos y máximos de la cuantía de la prestación contributiva de desempleo
– La cuantía del subsidio de desempleo
– Los ingresos máximos para poder solicitar justicia gratuíta
– Los ingresos máximos para poder solicitar una vivienda de protección oficial
– Los ingresos máximos para poder solicitar becas u otras ayudas al estudio
– Los requisitos de cotización para solicitar la prestación no contributiva por maternidad
– …

 
Cada vez menos personas

Por tanto, para decidir si nos corresponde o no una prestación, se tienen en cuenta los ingresos familiares. Si el índice según el que se estiman es muy bajo, mucha menos gente tendrá la opción de poder acogerse a esas prestaciones. Como así viene sucediendo: las ayudas o prestaciones, hoy en día, están dedicadas solo a las personas que están en situación de extrema pobreza, mientras mucha gente que lo necesita quedan directamente fuera porque sus ingresos son “demasiado altos”.

Según el ejemplo que hemos dado previamente, una pareja, con hijas e hijos, aunque ingresase una persona el salario mínimo y la otra un subsidio de desempleo, no tendría derecho a percibir asistencia jurídica gratuita. Como tampoco tendría derecho a otro tipo de prestaciones, becas, etc.

 
Prestaciones cada vez más bajas

Las cuantías de las prestaciones que se perciben también están sujetas a este índice. Como hemos visto anteriormente, un subsidio de desempleo de 480 euros no es ni mínimamente digno. Si se trata de un índice de miseria, también las prestaciones serán miserables, lo que fue, de hecho, el principal objetivo desde su creación.

 
Evolución del IPREM

Desde que se creó este índice en 2004 no se ha revalorizado apenas, ni siquiera según el aumento del IPC. Por tanto, además del recorte inicial que supuso desligarlo del SMI, está perdiendo valor año tras año, a medida que crece el nivel de vida. De hecho, no se ha revalorizado más que los años posteriores a ponerlo en marcha, tras lo que se ha mantenido prácticamente congelado.

Tal y como puede comprobarse en esta tabla:

 
El IPREM y el SMI

Como hemos explicado anteriormente, hasta 2004 el índice que se utilizaba para los asuntos de protección social era el SMI. En dicho año ambos índices estaban en los 460 euros; no obstante, a partir de ese momento, mientras el SMI ha ido aumentando, han dejado el IPREM estancado o con subidas muy inferiores.

En este punto hay que dejar claro que, aunque el SMI haya experimentado subidas, continúa siendo insuficiente. Según las recomendaciones europeas, el salario mínimo inteprofesional debería establecerse en un 60% del salario medio; en este momento, 1.400 euros, por lo menos, tanto en la CAV, como en Nafarroa. No obstante, incluso con las últimas subidas, el SMI queda todavía muy lejos (1.000 euros para el año 2022).

Aquí podemos observar la pérdida experimentada por el IPREM año tras año, en comparación con el SMI y el incremento del IPC: